Nuestros termómetros analógicos están basados en los principios del reacciones térmicas en bimetálicos y gases. Con estos sistemas se cubren rangos entre -200 y +700 °C, con diferentes exactitudes, tiempos de respuesta y resistencia contra efectos ambientales. La gran variedad de conexiones y los distintos diámetros y longitudes de bulbo permiten una excelente adaptación a las condiciones concretas del punto de medición. Los termómetros analógicos con capilar ofrecen una amplia flexibilidad de montaje. Todos los termómetros son aptos para operar con un termopozo para proteger los elementos sensibles.